Mantenerse segura
El sexo durante el embarazo
Estos son los puntos principales que debe saber sobre el sexo durante el embarazo:
- Si su embarazo es sano, puede tener relaciones sexuales. Usted y su pareja pueden usar posiciones que sean seguras y cómodas durante todo el embarazo.
- Las relaciones sexuales no lastiman a su bebé. El líquido amniótico del útero ayuda a proteger a su bebé durante las relaciones sexuales.
- Si tiene complicaciones del embarazo ahora o si las ha tenido en el pasado, tal vez no sea seguro tener relaciones sexuales durante el embarazo.
- Si después de tener relaciones sexuales, tiene sangrado intenso, dolores abdominales fuertes o pérdida de líquido amniótico, llame a su profesional o vaya a una sala de emergencia.
- Es normal tener deseos cambiantes sobre el sexo durante el embarazo. Hable con su pareja de lo que la hace sentir cómoda.
¿Cuándo no es seguro el sexo durante el embarazo?
El sexo puede no ser seguro durante el embarazo si usted tiene ciertas complicaciones ahora o si las ha tenido en el pasado. Si padece alguna de estas complicaciones, hable con su profesional médico para ver si puede tener relaciones sexuales:
- Está embarazada de múltiples (gemelos, trillizos o más)
- Tuvo un aborto espontáneo antes o corre riesgo de tener un aborto espontáneo en este embarazo. El aborto espontáneo sucede cuando el bebé muere en el útero antes de las 20 semanas de embarazo.
- Tuvo un bebé prematuro antes o tiene las señales del parto prematuro en este embarazo. El bebé prematuro es aquel que nace demasiado temprano, antes de las 37 semanas de embarazo. El parto prematuro es cuando su parto comienza temprano; antes de las 37 semanas completas de embarazo.
- Tiene un cuello uterino incompetente. Eso sucede cuando el cuello uterino se abre demasiado temprano en el embarazo. El cuello uterino es la abertura hacia el útero (matriz) que está en la parte superior de la vagina. El cuello uterino incompetente puede causarle el parto prematuro.
- Usted tiene placenta previa. Sucede cuando la placenta está muy baja en el útero y cubre todo o parte del cuello uterino. La placenta previa puede causar sangrado grave y otras complicaciones más adelante en el embarazo.
¿Cómo puede asegurarse de que el sexo no sea riesgoso durante el embarazo?
El coito sexual no perjudica a su bebé durante el embarazo. Los músculos del útero y el líquido amniótico que rodea a su bebé en el útero ayudan a protegerlo. El tapón mucoso ayuda a proteger a su bebé de las infecciones. Ese tapón es una masa de mucosidad que bloquea la abertura del cuello uterino. Si su pareja es de sexo masculino, el pene no tiene contacto con el bebé durante el coito sexual.
Consulte a su profesional si hay alguna actividad sexual no permitida. En algunos casos, le pueden aconsejar limitar la actividad sexual o prestar atención si está teniendo contracciones después del sexo.
Aunque las relaciones sexuales son seguras para la mayoría de las mujeres durante el embarazo, y no lastiman a su bebé, le convendrá protegerlo contra ciertas infecciones que usted puede contagiarse a través del sexo. Esto es lo que puede hacer para ayudar a protegerse a sí misma y a su bebé::
- Protéjase de las infecciones de transmisión sexual (ITS), también llamadas enfermedades de transmisión sexual (ETS). La ITS es una infección que puede contagiarse al tener relaciones sexuales sin protección o contacto físico íntimo con alguien que está infectado. Pueden causar problemas para su bebé durante el embarazo y el parto. Usted se puede contagiar una ITS si tiene relaciones sexuales vaginales, anales u orales. Si tiene relaciones sexuales durante el embarazo, hágalo solo con una persona que, a su vez, no tenga otras parejas sexuales. No tenga relaciones sexuales con una pareja que puede tener una ITS. Si tiene una pareja nueva, use un condón.
- Si tiene sexo oral, asegúrese de que su pareja NO le sople aire en la vagina. El sexo oral es el sexo en el que intervienen la boca y los genitales (órganos sexuales como el pene y la vagina). Soplar aire en la vagina puede causar una embolia de aire (una burbuja de aire que bloquea un vaso sanguíneo). Eso puede causar problemas graves para usted y para su bebé.
- Pregunte a su profesional de la salud si puede tener sexo anal. El sexo anal es el sexo en el que intervienen el pene y el ano. El sexo anal puede ser riesgoso durante el embarazo porque el ano está lleno de bacterias. Si tiene relaciones sexuales vaginales después del sexo anal, corre más riesgo de contagiarse una infección con bacterias en la vagina. Las bacterias son organismos diminutos que viven adentro y alrededor de su cuerpo. Algunas bacterias son beneficiosas para el cuerpo. Pero otras pueden causar enfermedad.
¿Cuáles son las señales de problemas durante o después del sexo?
Si siente dolor durante el coito sexual, avise a su profesional de la salud. Si tiene sangrado intenso, pérdida de líquido amniótico o dolores abdominales fuertes que no desaparecen después de las relaciones sexuales, llame a su profesional o diríjase a una sala de emergencia.
Es normal tener algún dolor abdominal y manchado después de tener relaciones sexuales durante el embarazo. Tener un orgasmo puede causar dolores abdominales. El manchado es un sangrado leve. Cuando eso sucede, le aparecen unas gotas de sangre en la ropa interior. El manchado es tan leve que la sangre no satura un protector femenino diario.
¿Cómo puede afectar el embarazo su vida sexual?
Durante todo el embarazo, puede cambiar su interés en el sexo y su deseo sexual (también llamado libido). Los niveles hormonales que aumentan o disminuyen y otros cambios en su cuerpo pueden afectarle el deseo sexual.
Avise a su pareja qué la hace sentir cómoda o incómoda sea cual fuere su estado de ánimo. El deseo sexual de su pareja puede aumentar o disminuir también. A veces la pareja se siente más cerca de la mujer embarazada y a veces puede sentirse más ansioso por su salud y la del bebé. Hablar abiertamente con su pareja sobre estos temas puede ser beneficioso.
Estos son algunos cambios comunes en el deseo sexual que tal vez sienta durante el embarazo:
Primer trimestre. Los niveles hormonales cambiantes a principios del embarazo y los cambios en su figura tal vez la hagan sentir sexy. Pero esos cambios también pueden dar lugar a malestares del embarazo que quizás le hagan perder el interés en el sexo, como sentirse cansada o con náuseas y vómitos, senos doloridos y necesidad de ir al baño con frecuencia.
Segundo trimestre. Es posible que se sienta mejor durante el segundo trimestre. Tal vez hayan desaparecido los malestares del primer trimestre o pueda controlarlos mejor en el segundo trimestre. Su abdomen está creciendo pero todavía es pequeño como para tener relaciones sexuales cómodamente. En efecto, tal vez sienta el deseo de tener relaciones sexuales con más frecuencia que en el pasado.
Las mujeres aumentan unas 3 libras de sangre durante el embarazo y la mayoría de esa sangre circula debajo de la línea de la cintura. Tal vez descubra que esa circulación extra de sangre le permita tener un orgasmo con mayor facilidad e incluso más de uno. El orgasmo es la sensación intensa de placer que producen las relaciones sexuales. Al tener un orgasmo, es posible que sienta contracciones alrededor de la vagina.
Tercer trimestre. Si usted y su pareja lo desean, pueden tener relaciones sexuales hasta el nacimiento de su bebé, a menos que el profesional médico le aconseje otra cosa. Hacia el final del embarazo, tal vez no sienta tanto interés por el sexo. A medida que se le agranda el abdomen, quizás le resulten incómodas algunas posiciones sexuales. También puede sentir menos interés en el sexo porque está pensando más en el parto y en tener a su nuevo bebé. Es normal sentir esas emociones. Usted y su pareja igualmente pueden demostrarse afecto e intimidad aunque usted no desee tener relaciones sexuales. .
¿Qué posiciones sexuales son mejores durante el embarazo?
Es posible que las posiciones sexuales que eran cómodas antes del embarazo y a principios de este resulten incómodas o incluso sean peligrosas en las etapas más avanzadas del embarazo. Por ejemplo, acostarse boca arriba (también llamada posición tradicional del misionero) después del cuarto mes de embarazo pone presión en los vasos sanguíneos principales por el peso de su bebé en crecimiento. Intente estas otras posiciones:
- La mujer arriba. Esta posición le permite controlar cuán rápido, lento y cómoda desea estar durante las relaciones sexuales.También puede evitarle la presión sobre el abdomen.
- Posición de la cuchara. Recuéstese de costado con su pareja en la misma posición detrás de usted. Esta posición ayuda a disminuir la cantidad de presión que se ejerce sobre su abdomen.
- Mujer en cuatro. Esta posición sobre manos y rodillas funciona mejor durante el primer y el segundo trimestres porque reduce la presión sobre su abdomen. A medida que se le agranda el abdomen, quizás esta posición le resulte incómoda.
¿De qué otras formas puede lograr la intimidad con su pareja?
No es preciso tener coito sexual para demostrarle afecto a su pareja. Usted puede tener momentos de intimidad al:
- Acurrucarse o arrimarse
- Besarse
- Masajearse. Es cuando usted y su pareja se frotan suavemente el cuerpo.
- Masturbación mutual. Es cuando usted y su pareja se tocan para alcanzar el orgasmo.
- Sexo oral
Para mantener la conexión con su pareja, hable de sus necesidades de manera abierta y afectiva. Déjese guiar por el goce y la comodidad. Si hay algo que no le resulta bien a uno de los dos, cámbielo. Si le preocupa que el embarazo está afectando la relación con su pareja, hable con su profesional de la salud.
¿Cuán rápido puede tener relaciones sexuales después del parto?
Es mejor esperar hasta después del chequeo posparto (alrededor de 6 semanas después de dar a luz) para tener relaciones sexuales otra vez.
Use un anticonceptivo confiable cuando se sienta lista para empezar a tener relaciones sexuales otra vez. Hable con su profesional de la salud sobre el anticonceptivo que sea seguro si usted está dando pecho.
Aun después de que su cuerpo se haya recuperado, estos cambios comunes pueden afectar su vida sexual:
- Puede sentir sequedad en la vagina por los cambios hormonales, en especial si está amamantando. Use una crema o gel lubricante para ayudar a que la vagina sea más resbaladiza. Intente distintas posiciones hasta encontrar la más cómoda.
- Tal vez no sienta tanto placer durante el coito sexual porque los músculos vaginales pueden estar débiles después del parto. Este problema suele desaparecer con el tiempo. Para fortalecer los músculos vaginales, haga ejercicios Kegel. Contraiga los músculos que usa para detener la corriente de orina y sosténgalos durante 10 segundos. Hágalo de 10 a 20 veces seguidas al menos tres veces por día mientras está acostada o puede probar hacerlo sentada o de pie cuando se sienta más fuerte.
- Quizás su deseo sexual no sea tan intenso como de costumbre. Eso puede ser por los cambios hormonales después del parto. Es normal, así que no se preocupe. Hay muchas razones por las que siente menos interés en el sexo, como sentirse muy cansada o estresada por el cuidado del bebé. O tal vez le preocupe que el coito sexual le resultará incómodo o doloroso. Para aumentar su deseo sexual, acérquese a su pareja en otros momentos que no sea en la cama. Si no tiene deseos de tener relaciones sexuales, intente otras formas de intimidad con su pareja.
- Puede sentirse fatigada por atender a su bebé nuevo. Usted y su pareja desearán dormir después de que el bebé se durmió. También es posible que tenga menos interés enseguida porque tiene menos tiempo, energía y enfoque para el sexo como nueva mamá.
¡No es fácil cuidar de sí misma cuando está dedicada por completo a cuidar de su bebé! Para ayudarla a sentirse mejor, coma alimentos sanos, haga algo activo todos los días y descanse lo más que pueda.
Si le preocupa tener relaciones sexuales otra vez, hable con su pareja. Tal vez su pareja sienta lo mismo. La mayoría de las parejas reanudan su vida sexual activa en algún momento del primer año de vida del bebé.
La mayoría de las parejas reanudan su vida sexual activa en algún momento del primer año de vida del bebé. Si sigue preocupada, siente dolor o molestias al reanudar las relaciones sexuales o se siente presionada para hacerlo, avise a su profesional de la salud.
Última actualización febrero de 2020